La noticia del día

Hoy tenía otra entrada en mente pero… la noticia del día no tiene desperdicio y como estoy muy sensible al tema… pues voy a llorar un poquito, lo digo porque los que me conocéis sabéis que no suelo ser tan… bueno empiezo.

Esta mañana por vía digital me he enterado que nuestro excelentísimo presidente del gobierno y sus maravillosas cabezas pensantes han decidido, entre otras cosas anular o suspender el mal llamado “cheque bebé”.

No voy a entrar en el trapo político, pues ya lo he hecho en otros blogs; treintañera con hijo siento mis blasfemias en tu blog, ha sido un impulso; papa lobo, lo de las barricadas sigo pensando que es la mejor opción).

Voy a decir en lo que me afecta:

Sí mis bebés no se hubiesen quedado en el camino, ahora yo sería una futura mamá a punto de dar a luz y de recibir 2.500 € para poder hacer frente a los primeros (y creo) más caros gastos de un ser humano en su vida.

No tendría que pensar en la familia para repartir gastos “tu el cochecito, tu la cuna”, podría ser independiente económicamente y la llegada de mi bebé sería para la economía familiar mucho más llevadera.

Sí, como es mi caso, los gastos propios de un recién nacido los pudiese absorber la economía familiar + ayudas familiares; ese dinero serviría para que su mamá o su papá pudiesen coger más tiempo el permiso de maternidad y poder así dar calidad de vida, no sólo al bebé si no a la familia.

Hoy sigo igual de noembarazada que ayer, hoy sigo con mis problemillas y mis medicaciones, hoy sigo haciendo cuentas y tomando temperaturas; pero hoy también comenzaré a llenar la hucha no sólo con las monedas de 2€ extranjeras, si no con las nacionales y todo lo que caiga, porque… señora ministra de economía, dígale a la vicepresidenta del gobierno que con lo que cuesta uno de los trapitos que suele sacar en las ruedas de prensa me amueblo toda la habitación de mi bebé con ajuar incluido!.

Porque algo tenemos claro Obi-Wan y yo, ni la crisis, ni el paro, ni la economía mundial pueden hacernos desistir de nuestra ilusión SER PADRES; eso sí, cada vez lo ponen más difícil los jodios!.