
En estos nueve meses, PequeñoJedi a aprendido ha ponerse de pie, mirar a su alrededor para buscar algún Jedi desprevenido, y lanzarle una de sus maravillosas sonrisas para que le ayude a andar por la habitación.
Si esto no es posible, PequeñoJedi que es un bebé de recursos se sienta y gatea por todos lados a tal hipervelocidad que ni el Halcón Milenario podría seguir su estela. Es capaz de recorrerse el pasillo en menos de diez parsels.
Sus aptitudes no acaban ahí, como buen PequeñoJedi es capaz de agarrar los objetos sin usar la Fuerza, y siendo su movimiento favorito el que terminará llevando cualquier cosa que esté a su alcance a la boca sin remisión; dando igual sea comestible o no.
Y esto sucede porque tantas fiebres han ayudado a que PequeñoJedi le salgan los dientes; y si con 6 meses era bidente, ahora con 9 tiene seis! Tres arriba y otros tres abajo, que le han dado a Leia muchas tardes de lagrimas, protestas y algún que otro mordisco desesperado... afortunadamente tenían a mano el Nanypredental, gracias al inmejorable consejo de LaMamádelasEwoks.
Estos nuevos seis dientes no le sirven gran cosa a la hora de la comida, pues sigue sin gustarle los purés de frutas, aceptando sólo de buen grado el puré de naranja y plátano; la pera, la manzana o el zumo de naranja prefiere tomarla por vía teteril.
Los purés de verduras con carne del huerto de Obi-Wan son sus preferidos, y no suele haber problema para que se los tome, el puré de pescado... bueno, si esta muy caliente y sabe a purrusalda se lo toma, pero ya ha dejado claro que prefiere la carne al pescado.
El único alimento que jamás desprecia, este bueno o con 39 de fiebre es la tetita de Mamá... esa teta que le consuela cuando MamáLeia no sabe que es lo que le pasa, que le alimenta sin esfuerzo cuando la fiebre le tiene amodorrado, o que le hace compañía mientras Leia Washapea con la CiberTribu.
Como podéis ver, la evolución de PequeñoJedi va dentro de los parámetros normales... salvo en una cosa. PequeñoJedi no habla, ni siquiera emite silabas como ta o ba o pa o ma... nada; lo único que han conseguido Leia y Obi-Wan es que chille... por lo que cuerdas vocales ya ha demostrado que tiene, y sordo no es.... lo que le hace pensar a Leia que este PequeñoJedi se parece mucho más de lo que parece a TioLuke...
El pelo, tras haber perdido gran cantidad empieza a volver a tener cantidad y se puede observar que esos preciosos rizos que tenía al nacer están suavizándose para pasar a tener el pelo ondulado... cachis!
Tras perder casi un kilo, y dar un fuerte estirón, PequeñoJedi ha perdido las lorzas de los brazos y piernas, aunque sus mofletes siguen siendo muy achuchables.
La hora del baño sigue siendo el momento preferido del día, y se divierte poniéndose de pie en la bañera y chapoteando mientras MamáLeia le anima con Olés; en este punto decir que y sabe que cuando se le lava la cabeza luego le van a echar agua por encima y no le gusta nada; pero como no es un PequeñoJedi rencoroso siempre termina con una sonrisa el baño.
Ya reconoce a MamáLeia, a Papá, a Tiababeante, LaMamádelasEwoks,TioLuke, progenitor A, las primas... pero lo que más le gusta es verse en los espejos, reconocerse y aporrearlos sonriendo y haciendo cucamonas a ese bebé tan simpático y guapo que hay al otro lado del cristal.
El móvil de MamáLeia también es muy interesante pues esta lleno de fotos y videos en los que él es el absoluto protagonista, aunque también es objeto de discordia pues desde que se lo ha cambiado MamáLeia no se lo deja babear ni tirar contra el suelo como antes.
En definitiva, PequeñoJedi es un bebé de nueve meses como otro cualquiera, sano y feliz; que hace que los días a su lado sean especiales y únicos, pues cada día tiene momentos especiales e irrepetibles que Leia y Obi-Wan se esfuerzan por retener en su memoria pues son conscientes que el delicado bebé que sacaron de la clínica aquella luminosa tarde de Abril poco a poco va dejando paso a un bebe regordete, y simpático que llena sus días de felicidad.