El miedo es el camino hacia el Lado Oscuro, el miedo lleva a la ira, la ira lleva al odio, el odio lleva al sufrimiento

26 de junio de 2012

Tía Babeante


Cuando Leia nació hace ya mucho mucho tiempo, se encontró con que tendría que compartir sus años de infancia, juegos, riñas, habitación y día de cumpleaños con otra princesa que había llegado de la Fuerza dos años antes.

Una princesa que para que no sufriera los tan temidos celos, a la llegada de un hermano, se le explicó que Leia era un regalo de cumpleaños... y en la mente de una niña de dos años se formó un lío bastante monumental.

Padme tuvo en alguna ocasión que rescatar a Leia in extremis porque su hermana mayor quería meterla en la cuna de los nenucos, o ya más mayor y cada vez que no hacía lo que su hermana decía se escuchaba “eres mi regalo de cumpleaños y si no haces lo que te digo te tiro a la basura” .

Hasta que un día, cuando las dos princesas jugaban, esta frase fue escuchada por la MaestroJediAbuela, quién tuvo que explicarle a la futura TiaBabeante que Leia no iba a ir a la basura, por muy regalo de cumpleaños que fuera.

Entonces se produjo una transformación....

La relación entre las dos hermanas cambió y se convirtieron en unas extrañas amigas, que no podían estar juntas pero tampoco separadas. En Tatooine había una lucha sin cuartel, si una quería dormir con la puerta abierta la otra no podía dormir sin cerrarla... pero cuando arreciaba la tormenta y los rayos y truenos iluminaban el dormitorio, Leia siempre tenía una mano que alargar para que su hermana no pasara el trance sola.

Y un día sucedió...

Leia entró en el Lado Oscuro de la fuerza y su hermana sufrió ausencias
Leia se fue de casa y la princesa se convirtió en la reina de la casa
Leia se casó y tuvo en su hermana la mejor y más preparada dama de honor
Leia tuvo un bebé y la hermana se convirtió en tía... TiaBabeante
Y entonces Leia recuperó a aquella compañera de juegos, aquella amiga incondicional que siempre tuvo en su infancia y que la adolescencia y la vida le hizo perder.

Y hoy TiaBabeante no leerá este post, porque TiaBaberante no lee el blog de Leia... esta demasiado ocupada enseñando a PequeñoJedi a chocar los cinco, cantarle su canción del barquito pequeñito,a reírse con esa risa sana y limpia, pero sobretodo le ha enseñado lo que es el amor incondicional de una persona a la que no le gustan los niños, ni las babas ni los mocos.

Por que PequeñoJedi no conoce la vida sin “ía Lelén”
Por que Obi-Wan  se siente feliz cuando pasa los fines de semana en Endor.
Por que Leia no quiere que quede un post muy ñoño...


FELIZ CUMPLEAÑOS!!!

21 de junio de 2012

4 años del VENGA VA!

 Hace cuatro años a estas horas, una mujer estaba mirándose al espejo del cuarto de baño familiar; el reflejo era el de una mujer que nunca pensó en que estaría en esa situación. Una mujer que fue educada para el siglo XXI, para ser independiente económica y afectivamente; por lo que nunca pensó en ser una damisela en apuros, al que el príncipe azul rescata blandiendo su espada, subido en su blanco corcel. Y sin embargo allí estaba esa mujer del otro lado del espejo, feliz de que su caballero Jedi hubiese tenido el valor de coger la flor del precipicio.

Y cuatro años después... esa mujer no se imagina vivir una vida sin ti.







Feliz cuarto aniversario Maestro.





P.P. Si alguien esta interesado en conocer "la verdadera historia" pinchar aqui, aqui y aqui.

6 de junio de 2012

Viaje a Naboo II Parte


Leia estaba emocionada, iba a comer con Suu, a conocer por fin a su gurú de la lactancia Eloísa, volvería a ver a La mamá de Julio, dar un fuerte abrazo a Marisa y saldar la cuenta pendiante de abrazos y apoyo con Belén...

Pero también... PequeñoJedi volvería a jugar con Pequeñin, al que adora y al que sabe decir su nombre!!!

¿Y Obi-Wan? Pues Obi-Wan estaba encantado pensando en volverse a encontrar con el gran maestro Jedi de la paciencia y el buen hacer que es “el papá de Bichito y Pequeñin” que como Obi-Wan, odia el tumulto y la gente, pero que por su mujer es capaz de coorganizar una superfiesta con castillo hinchable incluido sin perder el temple, la sonrisa y el buen humor.

La tarde transcurrió entre abrazos, confidencias, charlas y mucho aprendizaje... porque estar con Eloisa y oírle hablar con ese entusiasmo y esa cátedra merece la pena  hacer cualquier viaje.
Conocer por fin a Belén, y ver que los miedos son miedos normales, aunque PequeñoJedi sea un Ewok con muchos midiclodianos no deja de ser un Ewok con ganas de jugar, explorar y aprender, y hay que tener presente la luz al final del túnel.
Poder estar un ratito, jugando con  Alex y hablar un poquito con su mamá... que tantos y tantos whatsapps hemos compartido.
Ver y comprobar que Julito sigue siendo un niño encantador, dulce y simpático y como Mamá de Julio les trajo a Inés, Leia pudo también achuchar a la MiniEwok con los ojillos más bonitos.
Y volver a sentir la brisa fresca que es Suu, una brisa fresca al lado del mar, con olor a salitre y sonido de caracolas.

Leia y Obi-Wan habían pensado en salir hacia Endor a las siete de la tarde, pero estaba tan a gusto que les dieron las ocho y veinte... y lo pagaron... lo pagaron con:

Un  PequeñoJedi agotado de jugar, saltar y pasarlo genial que no podía dormirse de la excitación propia que llevaba.

Un Obi-Wan agotado que había tomado tantos cafés que no podía relajarse para dar una cabezada pero tampoco se sentía seguro como para conducir.

Una Leia en una nube de felicidad, que hizo que la sonrisa en la cara no se le quitara hasta que las líneas de la carretera comenzaron a desdibujarse por el sueño y el cansancio acumulado de todo el fin de semana.

Por lo que a menos de una hora de llegada, Leia no pudo por más y paró el Halcón Milenario para descansar un miserable cuarto de hora, que le sentó de maravilla y les permitió llegar a casa sanos y salvos.

¿La próxima quedada??? En Endor!!! Leia ha cogido apuntes y ha tomado buena cuenta de las magnificas ideas organizativas de Suu...

4 de junio de 2012

Viaje a Naboo Iparte


Obi-WAn tenía unos días de vacaciones, Leia tenía muchas ganas de ir a Naboo, y PequeñoJedi era reclamado por la familia con incesante clamor....

Por todo ello, el viernes nada más salir PequeñoJedi de la Miniestrella de la Muerte, subieron en el Halcón Milenario y cogieron velocidad de crucero para dirigirse a Naboo; esperando llegar antes de  la hora del baño...

Y el Lado Tenebroso de la Fuerza hizo de las suyas... y a unos 100 kilometros de Endor, un humo negro como la capa de Darth Vader se ve por el recodo de la carretera; Obi-Wan frena con sus reflejos Jedis lo justo para no golpear al X-Win que les precede... Lo que parece un cargero espacial esta ardiendo.

El atasco que se produce es más grande que la maldad de Palpatine, y tras una hora y media parados al sol, con PequeñoJedi sudando como un pollo, Leia decide salir con él para, si no refrescarse, si al menos estirar las piernas... entonces la Guardia de asalto imperial decide que ya les ha jodido lo suficiente el viaje y comienza a desviar el trafico... Leia coge en brazos a PequeñoJedi y corre al Halcón Milenario... no sea que Obi-Wan les deje en tierra!

Tras una hora y media de retraso, el viaje continua...

Obi-Wan le pide a Leia que sea ella quién continúe pilotando el Halcon Milenario...
PequeñoJedi sucumbe al cansancio y al calor y cae rendido...
El TomTom decide que tras tres años al servicio de la república se pasa al Lado Oscuro y ni la pantalla se ilumina...

Aunque parezca mentira, llegan sanos y salvos a Naboo, más concretamente a la casa de Tio Owen y Tia Beru.

El sábado transcurre entre visitas, achuchones y muchos sudores, porque... En vez de Naboo parecía que estábamos en las arenas de Tatooine, con dos soles aplanando a cualquier iluso que se pusiese al sol medio parsel!

Leia tuvo que remojar a PequeñoJedi cuatro veces en la tarde, Obi-Wan pudo ver a sus primos y tios y poder disfrutar de su compañía y Leia por fin descubrió el secreto encanto Kenobi.