Llegando a Endor, una llamada de Luke despierta a Obi-Wan que sentado en el lugar del copiloto del Halcón Milenario estaba “descansando los ojos” de tanta hipervelocidad…Luke, ha llamado porque acaba de recibir un paquete muy importante del carguero imperial; por fin ha llegado el AT-AT de PequeñoJedi (también llamado silla de paseo), tras un mes de espera desde su encargo, y sin poderlo estrenar para ir al viaje a Ciudad Nube… el mismo día de regreso llega el ansiado transporte.
Tras comer, descargar el Halcón Milenario de todos los trastos del viaje y dejar estirar las piernas de PequeñoJedi, Leia y Obi-Wan se encamina a Tattooine para recoger el AT-AT de PequeñoJedi, al cual le parece una idea estupenda pues con su nuevo transporte podrá ir sentado, y con lo cotilla que se ha vuelto…
El montaje fue rápido y sencillo (nos acordamos de PapaLobo y de el AT-AT de ElPekeñoKarateka) y aún lo hubiera sido más si Obi-Wan y Luke hubiesen empezado leyendo las instrucciones; pero ya se sabe… JEDIS!
En fin, después del montaje tocaba estrenarlo con Jedi dentro, y con la llegada de Mara, ¡todos a la calle! a pelearse por quién llevaba a PequeñoJedi, hubo que hacer turnos y todo, jiji.
Decir que tras unos días de uso y disfrute, a PequeñoJedi le encanta, quizá le gustaría aún más si MamáLeia le llevara mirando cara a la marcha, pero de momento no quiere ni oír hablar de no ver a PequeñoJedi mientras le pasea, así que se tendrá que conformar con ir haciéndole Cucamonas a su madre y echándole sonrisas y grititos para que MamáLeia le mire a él en vez de a la calle.
Los frenos de disco son muy muy útiles, sobretodo en las rampas y cuestas de Tatooine, y la amortiguación se nota considerablemente en el
jardín y los caminos de Endor. Pero lo mejor es que este nuevo transporte se lleva “con una sola mano” pues es supermanejable y mega cómodo, y aunque no era una de las imprescindibles opciones que Leia y Obi-Wan buscaban, decir que se pliega en un solo gesto, por lo que es aún más práctico si cabe de lo que estos primerizos papás habían pensado.En fin, que al final después de mucho mirar, preguntar y darle vueltas, han realizado una elección satisfactoria. El único pero, sería que no es la clásica silla de segunda etapa y es algo más voluminosa que una silla normal... pero eso tampoco es problema, pues en el Halcón Milenario coge perfectamente sin plegar y en el SiperoNo hay sitio de sobra para aparcarlo... ventajas de vivir en medio del Bosque!





